Introducción
La belleza de la piel es una necesidad para muchas personas. La belleza, como la juventud, sigue siendo uno de los ideales más perseguidos por la humanidad desde los albores de la sociedad. Aunque la genética juega un papel muy importante en nuestro aspecto total, existen muchos productos naturales y tecnologías que nos ayudan a mantener nuestro cutis saludable y joven. Uno de estos productos son las arcillas Francesas, cuyos poderes nutritivos y curativos han sido conocidos por los antiguos pueblos desde hace miles de años.
¿Qué son las arcillas Francesas?
La arcilla francesa es una arcilla fina con minerales útiles para la piel que se extrae de la naturaleza en Francia. Es 100% natural, no contiene productos químicos o sustancias dañinas para nuestra salud. Esta arcilla se usa como tratamiento facial común y profesional para mejorar la salud de la piel, ya que posee propiedades excepcionalmente antioxidantes, antiinflamatorias y antibacterianas que ayudan a mejorar la apariencia de la piel.
Tipos de arcillas francesas y sus usos
Las arcillas francesas se han agrupado en cuatro grandes grupos según sus características y usos: arcilla blanca, arcilla verde, arcilla rosa y arcilla de caolín.
- Arcilla blanca: Esta arcilla es una de las más suaves. Está indicada para pieles sensibles y delicadas. También es apta para todos los tipos de piel. Lima suavemente la piel y elimina las impurezas con suavidad, perfecto para combatir la sequedad e irritación en la piel. Esta arcilla tampoco desvanece la capa protectora natural de la piel como otras arcillas pueden.
- Arcilla verde: La arcilla verde es uno de los más comunes tipos de arcilla usado para tratamientos faciales. Esta tiene muy buenas propiedades astringentes, reduce el tamaño de los poros, limpia los residuos y promueve la revitalización de la piel. Este tipo de arcilla es excelente para tratar problemas de acné, picazón y enrojecimiento. Además, gracias a sus poderes astringentes, la arcilla verde también es útil para tratar problemas de sequedad.
- Arcilla rosa: La arcilla rosa se conoce como la arcilla ideal para la piel madura y envejecida. Está compuesto principalmente por arcilla blanca y arcilla roja, lo que la hace una mezcla ideal para mantener el equilibrio ácido de la piel. Esta mezcla contiene minerales como silicio, cobre, hierro, magnesio y zinc. Esta arcilla es excelente para suavizar la piel, eliminar las líneas finas, los signos del envejecimiento, así como para aclarar la piel.
- Arcilla de caolín: Esta arcilla está formada por el mineral caolín y, por lo tanto, es una arcilla muy suave. Esta es excelente para todo tipo de pieles, especialmente las pieles más sensibles. El caolín es un tipo de mineral natural suave y no tóxico que se usa para limpiar la piel y eliminar cicatrices, acné y otros errores de la piel. Esta arcilla es excelente para hidratar la piel y equilibrar el pH de la misma.
Propiedades de las arcillas francesas para la belleza de la piel
Las arcillas francesas poseen numerosas propiedades que permiten su uso como tratamiento cosmético para el cuidado de la piel. Entre ellas destacan:
- Excelente remineralizador: el uso de arcillas en cosmética ha sido tradicionalmente utilizado para el cuidado y remineralización de la piel.
- Gran acción remineralizante y nutritiva: la arcilla francesa es una gran fuente de minerales y nutrientes como el silicio, el hierro y el magnesio, que ayudan a regenerar la piel y mejorar la salud de la misma.
- Acción antiinflamatoria: la arcilla francesa posee una excelente acción antiinflamatoria, lo que la hace excelente para tratar la piel sensible o problemática.
- Excelentes propiedades astringentes: gracias a sus numerosos minerales, esta arcilla es capaz de limpiar la piel en profundidad y reducir el tamaño de los poros.
- Acción antioxidante: el uso de arcillas francesas también ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro de la piel gracias a sus poderes antioxidantes.
Consejos para usar las arcillas francesas
A continuación, te damos algunos consejos para usar correctamente las arcillas francesas para que obtengas los mejores resultados y preserven tu salud:
- Debes elegir el tipo de arcilla adecuado para tu tipo de piel para evitar reacciones alérgicas. Las arcillas francesas tienen tipos para diferentes tipos de piel, así que lo mejor es que uses la que mejor se adapte a ti.
- Lo mejor es que prepares la arcilla en casa con agua purificada o destilada. Esto te asegurará que el producto esté libre de contaminación y no posea ningún producto químico agregado.
- Es recomendable usar la arcilla en forma de mascarilla, mezclando la arcilla con agua o alguna crema hidratante hasta formar una pasta y aplicarla en la zona que desees tratar. También puedes mezclar la arcilla con jugo de limón para aumentar sus propiedades limpiadoras, y con alguna crema hidratante para aumentar la cantidad de minerales en la pasta.
- Espérate entre 10 y 15 minutos y lava la zona donde aplicaste la mascarilla con agua tibia.
- Aplica una crema hidratante para cerrar los poros y regenerar la piel.
- Es recomendable usar arcilla francesa dos veces por semana para mantener la piel fresca y saludable.
Conclusion
Las arcillas francesas son un producto natural maravilloso para tratar la piel. Son seguras para todos los tipos de piel y permiten mantener un balance saludable en nuestro cutis.
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